La terapia psicológica, también llamada psicoterapia, es el conjunto de técnicas y procesos que lleva a cabo el profesional de la psicología clínica hacia el paciente con el objetivo de mejorar la calidad de vida de este, mediante una modificación de su conducta, pensamientos, actitudes o afectos que pudieran estar causando algún malestar o padecimiento.
La psicoterapia o terapia psicológica, en consecuencia, parte del conocimiento de la estructura interna de la personalidad. Al comprender cómo funcionan las emociones, las conductas y los procesos psicológicos de las personas, se puede trabajar sobre ellos. Esto permite al psicólogo solucionar problemas que estén aquejando al individuo, como por ejemplo la ansiedad, depresión, fobias, entre otros.
¿En qué consiste la terapia psicológica?
La terapia psicológica consiste esencialmente en dotar al paciente de estrategias y herramientas para afrontar sus problemas. Técnicas como la modificación de conducta permiten a los pacientes controlar exitosamente sus emociones y sus comportamientos. Estas herramientas, en sí mismas, no requieren del empleo de fármacos.
La intervención psicológica se puede realizar para tratar una amplia gama de situaciones. Estas pueden ir desde dificultades cotidianas, en muchas ocasiones, hasta auténticos trastornos psicopatológicos. Esto significa que no es necesario sufrir un desorden psiquiátrico para acudir al psicólogo; de hecho, la mayor parte de las veces no es así. Muy frecuentemente, se trata de personas que no pueden o no saben gestionar determinadas situaciones de su vida diaria.
La terapia psicológica permite obtener beneficios incluso en casos de alta gravedad. La gravedad no tiene que ver con la profundidad del trastorno o patología subyacente, sino con la medida en que ha invadido los distintos espacios de la vida de las personas.
Si por ejemplo el problema se presenta únicamente en el trabajo, o solo en relación con ciertas personas, será más fácil y rápido de disolver que si se da con sus padres, pareja, hermanos, compañeros de trabajo, entre otras.
Beneficios que aporta la terapia psicológica
Te ayuda a sentirte mejor
Al poder hablar con confianza y con libertad sobre uno mismo a alguien que no te juzga sobre tus sentimientos y tus experiencias reprimidas, estás dejando expresar tus pensamientos y sensaciones ocultos, lo cual es beneficioso para el bienestar.
Te enseña herramientas para manejar conflictos
Las sesiones de psicoterapia te enseñan nuevas maneras (más adaptativas) de solucionar problemas. Además, te puede ayudar a percibir los conflictos de forma distinta, para que te afecten menos y seas capaz de relativizar la importancia de las situaciones tensas.
Te ayuda a cambiar las creencias limitantes
Algunas creencias son desadaptativas o limitantes y es necesario corregirlas, pues estas no son innatas, las vamos adquiriendo a lo largo de nuestra vida. Por ello, el psicólogo puede ayudarte a identificarlas, analizarlas, ponerlas a prueba y modificarlas.
Te ayuda a vivir en armonía contigo mismo y con los demás
La introspección que se lleva a cabo al asistir a terapia te permite conocerte mejor y superar, por ejemplo, una crisis existencial. Por tanto, la terapia psicológica puede ayudarte a solucionar este tipo de problemas, y es beneficiosa para encontrarte a ti mismo y para relacionarte con los demás de manera más efectiva.
Da asesoramiento profesional
El psicoterapeuta es un experto en la terapia psicológica y tiene amplios conocimientos sobre la conducta humana. Es por ello que no aplica recetas para solucionar problemas psicológicos, sino que estudia cada caso particular y trabaja a partir de las creencias, hábitos y contexto de vida de la persona que acude a terapia.
La terapia psicológica puede cambiar tu cerebro
Los estudios neurológicos están hallando cada vez más pruebas empíricas de la capacidad de la psicoterapia para modificar las estructuras cerebrales y mejorarlas, consiguiendo una mejor actitud vital para afrontar el día a día.