Desde que la Organización Mundial de la Salud informó sobre el aumento de casos de viruela símica o viruela del mono en el mundo, las autoridades sanitarias en Perú alertaron a sus centros de salud sobre este virus y sus complicaciones. Si bien la prioridad parece ser la vacunación por COVID-19, la duda surge torno a si existe una vacuna contra la viruela del mono.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), existen dos vacunas disponibles para prevenir la viruela que dan también protección contra la viruela del mono.
El doctor peruano Elmer Huerta, informó en un programa radial que el Gobierno Federal de los Estados Unidos puso a disposición de los ciudadanos estadounidenses esos dos tipos de vacunas. Sin embargo, es solo para aquellas personas que hayan tenido un claro contacto con alguien que alguien que tiene viruela del mono.
¿Cuáles vacunas existen?
Una de ellas es la vacuna “tradicional”, usada para erradicar la enfermedad en 1976, llamada ACAM2000. Y la otra vacuna contra la viruela del mono, creada en 2019, a partir del mismo virus utilizado por Edward Jenner, el vaccinia.
Huerta explicó que para aplicar la vacuna tradicional se utiliza la escarificación, en la que se causa una herida y se coloca una gota de la vacuna. En cambio, la vacuna Jynneos, se aplica una inyección subcutánea.
La nueva vacuna contiene una forma modificada del virus, llamada Vaccinia Ankara modificada. Esta no causa enfermedad en los humanos y además no se replica en las células humanas. Por lo tanto, las inoculaciones accidentales se minimizarán. Jynneos se administra en dos dosis con cuatro semanas de diferencia entre ellas.
“La vacuna tradicional no debe aplicarse a las personas que tengan comprometido su sistema inmunológico (como personas con VIH, por ejemplo) o tengan las defensas bajas. Para la vacuna más nueva, no hace falta este último requisito y cualquier persona se la puede aplicar”, dijo Huerta.
¿Es efectiva la vacuna tradicional de la viruela para la viruela símica?
Las vacunas disponibles en la actualidad poseen un 85% de protección. La respuesta más contundente para esta pregunta es que consiguieron erradicar la viruela. La duda estaba en si sus componentes protegían contra la viruela del mono y la OMS lo confirmó.
Además, este organismo internacional de salud explica en su página web que las vacunas originales contra la viruela dejaron de estar disponibles para el público en general, y es poco probable que las personas menores de 40 a 50 años hayan sido vacunadas, ya que la vacunación contra la viruela terminó en 1980.
Sin embargo, la OMS desaconseja la aplicación de la vacuna contra la viruela de forma masiva. Esto se debe a que “en los pocos lugares en los que se dispone de vacunas, se están utilizando para proteger a quienes pueden estar expuestos, como los trabajadores sanitarios y el personal de laboratorio”.
El doctor Tedros Adhanom Gebreyesus, director de esa organización de salud, manifestó que el suministro de los antivirales y la aprobada vacuna contra la viruela del mono es limitado. “La OMS está desarrollando un mecanismo de coordinación para la distribución de suministros basado en las necesidades de salud pública y en la equidad”, detalló.
Aumento de casos en Perú
Desde mayo de 2022, se están identificando múltiples casos de viruela símica en varios países no endémicos. Esto no es típico de las características de la viruela símica en el pasado.
Este 4 de julio de 2022, el Ministerio de Salud peruano (Minsa) informó que al menos 15 casos en personas de entre 20 y 40 años se han detectado en la capital del país. El ministro Jorge López, en conferencia de prensa, indicó que Perú se encuentra en el escenario es de tipo 2, de acuerdo a la transmisión local del virus.
Mientras que el jefe del Instituto Nacional de Salud (INS), Víctor Javier Suárez, comunicó que la variante que está circulando es la menos letal y virulenta de las dos que existen en el mundo. De acuerdo con la OMS, la variante presente en Perú tiene un promedio de mortalidad del 1% al 3% en comparación con la otra, que va del 3% al 6%.
Cualquier persona que tenga contacto físico estrecho de cualquier tipo con alguien que tenga viruela símica corre el riesgo de contraer la viruela del mono, independientemente de quiénes sean, qué hagan, con quién elijan tener relaciones sexuales o cualquier otro factor.