La diabetes es una enfermedad crónica e irreversible del metabolismo en la que se produce un exceso de glucosa o azúcar en la sangre y en la orina. Esta afección se debe a una disminución de la secreción de la hormona insulina o a una deficiencia de su acción. ¿Qué relación hay entre la diabetes y COVID-19?
En las personas con diabetes hay un exceso de glucosa en sangre (hiperglucemia), ya que no se distribuye de la forma adecuada. La glucosa elevada es perjudicial para todo el organismo, pero principalmente para el corazón, el riñón y las arterias, por lo que las personas que tienen diabetes y no lo saben, o no la tratan, tienen más riesgo de problemas renales, infartos, pérdida de visión y amputaciones de miembros inferiores.
Diabetes y COVID-19: ¿qué tan vulnerable es esta población?
Para los diabéticos cualquier infección tiene un riesgo doble. Por un lado, puede descompensar la propia diabetes y, por otro, las complicaciones derivadas de esta infección pueden ser más graves. En el caso del COVID-19, las personas con diabetes tienen más riesgo, ya que la descompensación aumenta la gravedad y la mortalidad de la enfermedad.
Las razones que pueden hacer a los diabéticos más vulnerables frente al COVID-19 son básicamente dos: en primer lugar, el sistema inmunitario se ve comprometido, lo que dificulta la lucha contra el virus y probablemente conduce a un período de recuperación más largo. En segundo lugar, el virus puede prosperar en un entorno de glucosa elevada en la sangre
De acuerdo con una investigación de la profesora Juliana Chan, de la Universidad de Hong Kong y el Hospital Príncipe de Gales en Shatin (China), revela que los pacientes diabéticos, que constituyen al menos un 30% de los contagiados de COVID-19, tienen entre dos y tres veces más riesgo de morir que el resto, según han anunciado en la sesión especial sobre el COVID-19 que tuvo lugar en la Reunión Anual en línea de la Asociación Europea para el Estudio de la Diabetes (EASD) en septiembre de 2020.
Es importante aclarar que los diabéticos en sí mismos no son más propensos a contraer el COVID-19, son más vulnerables, lo que significa que en caso de contagiarse pueden presentar un mayor deterioro y propensión a fallecer que un paciente que no tiene diabetes.
Recomendaciones para los diabéticos
Los pacientes que se contagien y manifiesten un cuadro leve, o que son relativamente asintomáticos a causa del COVID-19, pueden ser controlados en casa, incluso si tienen diabetes. Es importante que estos pacientes controlen de cerca sus síntomas y sus niveles de azúcar en la sangre.
Los pacientes deben llamar a su médico inmediatamente si no pueden controlar sus niveles de azúcar en la sangre o si sus síntomas empeoran y experimentan náuseas, vómitos o problemas para respirar. Esto podría significar que la infección está empeorando.
Las personas con diabetes deben seguir las recomendaciones de los Centros de Control y Prevención de Enfermedades para reducir el riesgo de contraer el COVID-19:
- Evitar las aglomeraciones de gente y reuniones.
- Practicar la higiene de las manos.
- Mantener una distancia de más de dos metros de los demás y usar mascarilla.
También es muy importante que los pacientes controlen su diabetes mediante mantenimiento del objetivo de los niveles de azúcar en sangre y prevención de las fluctuaciones, mejorar y controlar la dieta y practicar ejercicio en casa y revisar otras enfermedades como la hipertensión o las enfermedades cardíacas, para que sean tratadas adecuadamente.
Si eres diabético o dependiente de insulina, durante esta pandemia debes extremar los cuidados para evitar el contagio. Si no tienes esta enfermedad pero alguien en la familia sí, también es importante cumplir con las medidas de bioseguridad para proteger a nuestra familia.