Los trastornos músculoesqueléticos de origen laboral son el principal problema de salud relacionado con el trabajo en todos los países industrializados y una de las primeras causas de absentismo laboral. ¿Cuáles afecciones musculares relacionadas con el trabajo son más frecuentes?
De acuerdo con el Instituto Sindical de Trabajo, Ambiente y Salud (ISTAS) de España, al año en promedio se presentan 80.000 casos nuevos de enfermedades laborales, y la mayoría alteraciones son osteomusculares, unos 20.000 aproximadamente.
Las lesiones musculoesqueléticas o afecciones musculares son aquellas lesiones que afectan a los tejidos blandos del aparato locomotor de los huesos, ligamentos, músculos, tendones, nervios y articulaciones y vasos sanguíneos. Estas lesiones pueden aparecer en cualquier región corporal, aunque se localizan con más frecuencia en: espalda, cuellos, hombros, codos, muñecas, rodillas, pies y piernas.
Tipos de afecciones musculoesqueléticas
Las afecciones musculoesqueléticas pueden ser óseas, cuando están relacionadas con los huesos; articulares, cuando se deben al excesivo uso de la articulación afectada o al mantenimiento de posturas forzadas; y periarticulares, cuando son lesiones que afectan a tendones y ligamentos.
La concentración de fuerzas en manos, muñecas y hombros; las posturas estáticas forzadas; el manejo de cargas pesadas en condiciones inadecuadas; y el incremento del ritmo del trabajo son causantes de que este tipo de lesiones sean tan frecuentes.
Los síntomas suelen manifestarse como: dolor en los músculos o las articulaciones, sensación de hormigueo en el brazo o la mano, pérdida de fuerza y sujeción en la mano, pérdida de sensibilidad y hormigueo.
Afecciones musculares relacionadas con el trabajo más frecuentes
Los trastornos musculares más frecuentes según las partes del cuerpo en los que se presentan:
- Hombros y cuello: dolor, espasmo muscular, lesiones discales, síndrome cervical por tensión, torticolis, tendinitis, periartritis y bursitis.
- Mano y muñeca: síndrome del túnel carpiano, tendinitis, tenosinovitis, síndrome del escribiente, ganglión, contractura de Dupuytren.
- Brazo y codo: epicondilitis, síndrome del túnel radial, bursitis, epitrocleitis.
- Espalda y zona lumbar: hernia discal, lumbalgias, ciática, dolor muscular, protusión discal, distensión muscular, lesiones discales.
Hacer pausas activas, tomar aire, llevar una alimentación saludable y aumentar los niveles de actividad física durante las horas trabajo, pueden reducir considerablemente los riesgos de estas enfermedades y otros graves problemas de salud, a la vez que le darán, tanto a empleados como empleadores, una mejor calidad de vida.